OVERBOOKING
Esteban Torres SagraHa sido mala idea instalar el bufete aquí, pero me calenté con la pandemia y la deslocalización. Además, así ofrecía empleo a gente de la España vaciada y daba otra oportunidad a la población de afrontar el futuro. Todo desde una perspectiva ecológica.
Nada más lejos de la realidad: las gallinas campan a sus anchas y producen interferencias con la wifi, un conejo ha roído los cables de la impresora y el chillido matutino de los vencejos hace que mi escritorio parezca un remake de “Los Pájaros”. El cochino se come las alegaciones en cuanto me descuido y los gatos en celo se persiguen por las mesas sin pudor.
Me siento vulnerable e incapaz de erradicar las malas costumbres de los bichos. Y encima, desde que me grabaron los de “Abogados por el mundo”, no paran de llegar colegas.
Hoy somos ya siete despachos en una aldea de 53 habitantes.
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Muy divertido relato. Con crítica adicional a la España vaciada.
Buen trabajo.
Gracias David. Es lo que tiene ser de un pueblo pequeñito, que se conoce la parte menos bucólica de la realidad. Un abrazo
Los animales al poder. Divertido y con su punto de ternura a la vez.
Suerte.
Muchas gracias, Lola. Te dejo que el gato se zampa al ratón con cable y todo.
Si algo quedó demostrado durante la pandemia, es que a ese grupo de seres vivos que denominamos animales salvajes, si les dejamos un poco de espacio, gustosos hacen uso de él, que tienen el mismo derecho que nosotros. Sus necesidades y las nuestras difieren, por lo que la convivencia a veces puede volverse un tanto ardua.
La idea de repoblar la España vaciada está muy bien, que no falten abogados es un buen objetivo, pero las sociedades se enriquecen con la diversidad.
Muy divertido y un ejemplo de cómo una idea loable, como puede ser volver a la naturaleza, para aliviar las superpobladas macrociudades, si no se plantea con criterio, está condenada al fracaso.
Un abrazo y suerte, Esteban
Ya lo dice el refrán «del dicho al hecho…» La teoría es una cosa, en esta caso factible gracias a la tecnología y luego la realidad es otra. Un abrazo y muchas gracias.
Esteban, me ha parecido muy divertido tu relato, entre los animalitos y lo de abogados por el mundo…muy simpático.
Te deseo mucha suerte y te envío un abrazo con mi voto.
Marta
Muy agradecido. Los de «Abogados por el mundo»ese llegaron al principio, cuando todavía el ardor rural dominaba mis pasiones.
Esteban, bravo y olé!
Yo no podría acercarme a visitar tu bufete porque me imagino que en ese entorno habrá muchísimos bichos, pero me rindo ante tu imaginación animalaria y te aplaudo.
Muchísima suerte y un abrazo teledirigido.
Gracias, Towi. Te regalo una gallina si te llegas.
Muy bueno, Esteban. Me encantan las interferencias de tanto animalejo en la rutina diaria.
Creo que mi aldea estaba cerca de esta, en efecto, pero por suerte la tuya ha terminado mejor. Cuídala mucho.
Suerte y mi voto.
Gracias. El ámbito rural engaña mucho. Hay más ruido que en la ciudad con diferencia. Un beso.
Jajaja,… Indudablemente eres un verdadero relator y tu mente, imaginativa y locuaz, brilla cada mes superándote a ti mismo.
¿Has intentado pasarte a la novela? Porque con un horizonte de miles de palabras por delante, no quiero ni imaginar lo que puedes llegar a hacer con ellas y así, tendríamos los demás alguna oportunidad en este concurso. Felicidades, Esteban, tu «overbooking» es genial.
Me halagas sobre manera. Sigue así. No es broma. Muchas gracias. No tengo paciencia, ni técnica para escribir una novela. Un abrazo
Un relato divertido y con crítica social. Ánimo, Esteban, que la ley y el orden prevalezcan entre tanto bicho.
Te deseo suerte y te doy mi voto.
Besos apretados.
Gracias Pilar. Aprecio mucho tus comentarios cada mes.
Tan original y divertido como siempre. Enhorabuena, Esteban. Mi voto.
Muchas gracias Juan Manuel por tu visita y comentario. Un saludo.
De la España vaciada a la pleito-saturada. Tienes mi voto.
Muy agradecido, Ángel. Desde ahora se medirá la densidad de población en abogados por km cuadrado. Un abrazo.
Menuda fauna tienen en ese bufete, suerte Esteban y saludos!
Muy agradecido Wibo. Y eso que no hablo de insectos y arácnidos. Un abrazo.
Buena idea, Esteban. Igual que hay pueblos de vestidos de novia, de zapaterías, de bodegueros, un pueblo hasta hace poco vaciado, ahora lleno de despachos de abogados, como el londinense barrio de Temple.
Mucha, y buena, suerte.
Gracias, Manuel. Imagínate. «Los Monegros le regala el solar para instalar su despacho de abogados» o «Venga a Las Bárcenas, nadie interrumpirá la redacción de sus alegatos». Un saludo.
Muy bueno.
Gracias por tu comentario. Un abrazo.
Que bonito sería, llenar la llamada España vaciada. Tu relato me trae a la memoria a esos animales que se vieron merodeando por los pueblos, el año pasado en pleno confinamiento. En mi pueblo aparecieron grupitos de cabras monteses provenientes de la sierra.
Enhorabuena por tan simpático relato y suerte, un saludo.
Muchas gracias por tu comentario y tu voto. Un saludo.
La España vaciada versión bufete deslocalizado…. y con tanto bicho, y el abogado, un bicho más. relato original y casi hippie.
mi voto a ese overbooking
La España vaciada versión bufete deslocalizado…. y con tanto bicho, y el abogado, un bicho más. relato original y casi hippie.
mi voto a ese overbooking campestre
Muchas gracias, Santiago. Algunos pueblos desdicen el bucolismo nada más pisarlos.
Excelente trabajo, ojalá tengas suerte.
Gracias, Carolina. Dios te oiga.
La fama que da la televisión, que siempre lo arruina todo. En cualquier caso, tú, desde este foro en el que siempre nos deleitas con tu fina ironía y tu arte en la escritura, sí que eres un ubetense por el mundo. Gran relato. Mi voto y un abrazo.
Muy agradecido y sonrojado por tus amabilísimas observaciones. Un abrazo con media mascarilla, que ya estoy vacunado doblemente.
Jajajaaaaaa !
Me encanta, Esteban.
Qué batiburrillo de bichos campando a sus anchas, liándose entre los cables y jugando sobre el escritorio. Y encima el wifi va cuando los animalejos le dejan y no paran de llegar colegas.
Enhorabuena y mucha suerte. Tienes mi voto.
No se puede ser original, enseguida te copian. Aunque contigo lo tienen difícil.
Mi aplauso.