Imagen de perfilDOCE HOMBRES SIN PIEDAD

Guillermo Portillo Guzmán 

La diversidad de profesiones, estilos de vida y niveles culturales de aquellos doce hombres tan dispares entre sí no representaba a priori un impedimento para que, con absoluta seguridad, tomasen su decisión personal con plena responsabilidad y justicia.
Tras un larguísimo juicio en el que la aportación de dudas más que razonables por parte de la acusación les hizo fortalecer la sensación de autoría hacia el presunto culpable, se retiraron a deliberar en una sala incomunicada del exterior, donde, tras una votación secreta y anónima, once votaron en contra y uno a favor.
Ante la unanimidad requerida para el fallo, se solicitó al disidente que expusiese sus motivos de forma razonada y urgente, pues quedaban solo dos días para finalizar el año.
Cuarenta y ocho horas después, recibí una llamada que cambió drásticamente el rumbo de mi vida…
Había ganado el concurso de relatos de la Abogacía Española de 2021.

 

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