Un buen principio
Juan Manuel Chica CruzEsperando en los Juzgados leo en un periódico una necrológica que hace estremecer mi memoria. Fue mi primer cliente y recuerdo lo llamativo de nuestro encuentro. Acudía a su rescate como abogado del turno de oficio.
Quién te ha dado vela en este entierro me espetó. Vaya cartel de presentación . Le expliqué tembloroso su derecho a justicia gratuita y le sorprendió que se pudiera decretar algo así para gente como él. Desde entonces le asesoré por el complicado mundo de la ley aunque su mundo lo fuese aún más. Huérfano desde pequeño, en una barriada dónde la palabra tráfico nunca iba relacionada con la automoción, prometió convertirse en hombre de ley y lo consiguió. La realidad siempre es negociable —decía — . Y aunque la palabra cáncer le contradijera tenía razón. Aquel principio suyo también lo sigo yo. Me ayuda a ser buen abogado: la realidad siempre es negociable.
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Siempre cabe una negociación, desde luego. Precioso relato. Enhorabuena y suerte.
Muchísimas gracias por tus palabras y el voto.
Interesante historia. Seguiré el principio. Mi voto y gracias.
Ese principio me está costando pero sigo perseverando. Muchas gracias!!
Mi voto, Juan Manuel, no es negociable. Ahí lo llevas. Suerte.
Muchas gracias, Esteban, por tu voto. Un abrazo!!
Todo es negociable, ya lo creo! Suerte y mi voto, Juan Manuel.
Todo es negociable, sí, pero a mí me cuesta, ja ja ja. Muchas gracias, Eva. Un abrazo.
Se me ocurre un principio opuesto: la imaginación y la ensoñación no son negociables (o no deberían serlo).
Suerte, Juan Manuel.
Muchísimas gracias, Manuel. Otro principio integrador entre los dos podría ser: la realidad con imaginación y ensoñación siempre es negociable, jajaja. Un abrazo!!
Juan Manuel! Me ha gustado mucho tu relato… enhorabuena! Tiene frases estupendas como «la palabra tráfico nunca iba relacionada con la automoción»… genial!
Te deseo mucha suerte y te mando mi voto y un abrazo!
Marta
¡¡Muchas gracias, Marta!!!
Hola, Juan Manuel.
Da yuyu lo de leer las necrológicas, pero a la gente le gusta (a mi madre, le encanta)… Como a mí tu micro.
Suertísima y este abrazo a dos manos.
Muchas gracias!! Un abrazo muy fuerte.