Circo Murphy
María Sergia Martín González- towanda Tras la sobremesa, acudió a la jaula de los tigres. Tenía el propósito de hablar con el tragasables y definir sus verdaderos sentimientos. La funambulista, turbada ante aquella enamorada confesión, desvió su barra rozando ligeramente el brazo del lanzador de cuchillos. Entonces, un escalpelo desatinado impactó en el baúl del mago. Brincaron conejos, palomas y ratones. Coléricos, encerraron al ilusionista en la caja. Luego, saltaron sobre ella y desapareció. Los ratones hostigaron a los elefantes, que huyeron en estampida. Todos menos uno que, asustado, olvidó la coreografía desplomando su pesada pata sobre la domadora. Los niños rieron como nunca y las madres chillaban espantadas. Una leona hambrienta lanzó miradas sospechosas al gordo petrificado de la primera fila. Entretanto, los payasos preguntaban, entre carcajadas, si había algún médico en la carpa. Ante el aluvión de posibles demandas, el empresario del circo pidió por megafonía asesoramiento legal y urgente de algún abogado.
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Versión gore de «se armó el Belén». Menudo cruce de la ley de Murphy con el efecto mariposa. Al final «todos a la cárcel», como corresponde a un micro Berlanguiano. ¡Enhorabuena!
Hola, Ángel.
A la cárcel con todos es una buena idea.
Gracias por tus palabras y unos abrazos.
Es un gran desastre el que planteas, imagino a todos chillando o corriendo y haces que se me dibuje una sonrisa.
Enhobabuena María.
Suerte.
Hola Mayca.
Sí que lo es. A mí me causaría espanto.
Un abrazo gigante.
Holaaa, Tow!!!!
Se armó buena!!!
A veces, las consecuencias del amor pueden ser nefastas :)
Un abrazoooo grande para ti (y mi voto)
Hola, Amparo.
Además que sí. El amor es lo que tiene.
Gracias, guapa, y unos besos.
Divertido, pero macabro.
Enhorabuena, Doña.
Hola, Belén.
Jajaja, a mí también me lo parece.
Gracias y abrazos.
Jajaja, me imagino las caras. Muy desternillante tu circo.
Un abrazo.
Hola, Carmen.
Me alegro que te pareciera divertido.
Unos abrazos enormes y muchísimas gracias.
Hola, Towa.
Demandas hailas, ya lo creo.
Me gusta el ritmo que le das a las letras.
Saludos.
Hola, Clara.
Seguro que alguna caerá.
Gracias por venir.
Un abrazo inmenso.
Hola, Towi!
Cómo están ustedeeees???? (por lo del circo, je, jeeee)
Volvisssteeeee! Bieeeen!!!
Y con un relato de los tuyos, perfectamente hilado, parece un dominó, cómo vas engarzando un eslabón con otro hasta el final… Murphy también bien traído, ja, jaaaa!
Me ha encantado.
Te mando mi voto, un abrazo y una lagrimita (snif) porque no me han elegido… cachiiiis!!! El mes que viene (a ver, a ver…).
Suerteeee!
Marta
Hola, Marta!!!
Me encantaban los payasos de la tele, de la tele en blanco y negro, así que no te digo ná.
Aunque no te lo creas, estas cosas pasan.
Jolines, siento que este mes no estés.. ¡qué rabia!, pero tú retomas y el mes que viene te los traes de calle.
Gracias, guapa.
Un abrazo grandísimo.
Encuentro amor y disturbios en tu historia. El amor como desencadenante de una larga serie de infortunios que, bien sûr, terminarán en los juzgados.
Simpática historia, María.
Te deseo mucha suerte con este circo.
Hola, Javier.
Bien sûr, en los juzgados, ya lo creo.
Gracias y unos abrazos.
Hola, Towanda.
Tu estilo inigualable una vez más, y ya son unas pocas. Cuánto y con sentido (o esta vez sin alguno: por lo del caos, la famosa ley de Murphy) consigues colocar en el texto. Todo viene a cuento y se presta a la peripecia. Y con un ritmo, un dinamismo endiabladamente musical que nunca nunca chirría. Y al fin un abogado, como es de ley, para desfacer entuertos. Mi más muy mayor enhorabuena. Y un beso.
Hola, Eduardo.
Aquí van a tener que emplearse a fondo los abogados porque lío hay para dar y tomar.
Acepto tu más mayor enhorabuena y espero leerte pronto por aquí también.
Un abrazo y muchísimas gracias.
Dice que el amor es el motor del mundo, pero en tu micro lo veo como más como un detonador, jaja.
divertido, sin duda.
Suerte,
Hola, Carlos.
Entonces concluiremos que el amor es el motodetonador del mundo.
Gracias y abrazos.
Me muero si una leona me lanza una mirada sospechosa. Loco y divertido, como tú.
Normal. Y yo.
Un abrazo y gracias por venir.
Suerte, que el micro la merece.
Saludos.
Gracias, Ernesto.
Un abrazo gigante.
Un sentimiento lanzado sin previo aviso que, cual alas de mariposa, desencadena un efecto tragicómico. Genial, Towanda. Un abrazo.
Hola, Salvador.
Pues sí, ya lo ves. Amor y tragicomedia, como la vida misma.
Un abrazo enormísimo y gracias.
Qué bueno!! Me encanta.
Suerte.
Votada.
Hola, Yolanda.
Me alegro muchísimo de verte, leerte…
Gracias, guapa.
Un abrazo enorme.
Otro voto más, la historia lo merece. Felicidades!!
:-)
Gracias, Paloma.
Un abrazo grandísimo.
Todos sabemos que hay dos grandes escritores apasionados por el circo: Ramón Gómez de la Serna y «Towanda». Y es sabido que en el circo hay leyes que se cumplen a rajatabla: la de la gravedad, aunque muchos circenses la desafíen, y las de Murphy, De ahí que se diga: «pongo un circo y me crecen los seres verticalmente disminuidos y se torna culito de bebé la cara de la mujer barbuda».
Mucha suerte, María. Que sigan siendo tus lemas «más difícil todavía» y «el espectáculo debe continuar».
Un beso.
Hola, Manuel.
Un comentario que bien podría ser un micro de los tuyos. De esos que trabajas con talento y mimo.
Efectivamente, sí me gusta el circo. No sé si tanto como a Gómez de la Serna, pero he disfrutado mucho viendo el más difícil todavía y, sobre todo, a los payasos… Uf, qué tiempos.
Te he echado de menos este mes, pero seguro que ya estás afilando el lápiz para volver a la carga.
Un abrazo gigante, Manuel, y Feliz 2018.
Ah, y gracias por acercarte siempre con palabras tan amables.