NUEVOS TIEMPOS
SANTIAGO MESSA POULLET El modelo de industria había cambiado hacia un nuevo patrón en la práctica del derecho. Todo se volvió más cibernético, más wapseable y más energéticamente sostenible. La post pandemia había conformado un escenario socioeconómico que obligaba a una adaptación conceptual de la abogacía. Las denuncias a las empresas y a los organismos oficiales proliferaron como setas y los bufetes se reciclaban a los nuevos tiempos. Mayor producción no era sinónimo de mayor beneficio. Por eso cuando la directiva del bufete decidió invertir en cambiar la imagen de la sede, todos supimos que ganaríamos el pleito al inminente futuro que se hacía inquietantemente presente.
Las togas se cambiaron por batas quirúrgicas y los abogados dominadores del lenguaje de signos se volvieron más cotizados; la elocuencia antaño muy valorada hoy era un factor de riesgo y las distancias de seguridad provocaron más de una fuga de delincuentes convictos.
Letrados… nuevos tiempos.
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O tempora, o mores…
Aunque los seres humanos seamos los seres más adaptables del universo (por encima de las bacterias extremófilas), y los juristas seamos seres humanos, no sé yo…
Mi voto, Santiago. Mucha, y buena, suerte.
Jajaja Manuel. Comentario muy acertado y ajustado. Sobreviviremos adaptándonos… No queda otra aunque es más que lícita la duda razonable. Gracias por tus palabras y tu voto
Nuevos tiempos que ojalá nunca nos sobrepasen. Enhorabuena por tu relato, muy bien contado, preciso y quirúrgico. Mi voto y un abrazo
Gracias poeta Nicolás por tus afectuosas palabras y siempre lo mejor está por venir, nunca debemos perder la capacidad de sorprenderse y reinventarse
Los nuevos tiempos obligan a reinventarse a todo el mundo, incluidos los abogados.
Muy buen micro, Santiago. Te deseo muchísima suerte y te doy mi voto de chocolate.
Besos apretados.
Soy adicto al chocolate, por tanto, un voto de chocolate está sencillamente… para comérselo. Gracias Pilar. Suerte con Charlee, que eso sí que está apretadísimo.
Santiago, es buenísimo tu relato. Muy bueno lo de que las togas se cambiaron por batas quirúrgicas, que la elocuencia hoy es un factor de riesgo y que las distancias de seguridad provocaron más de una fuga de delincuentes convictos.
Gracias aurora. Esta pandemia ha puesto el mundo al revés, hay que adaptarse a la nuevos tiempos y los abogados debemos también estar atentos… Aunque sea llevado al extremo
No sé yo si me gustan los nuevos tiempos, aunque me va a dar igual, ¿verdad?
Lo que sí me gusta es tu relato.
¡Suerte! (con los nuevos tiempos también).
Gracias margarita… Me temo que algunos nuevos tiempos han llegado para quedarse pero siempre tendremos un microrrelato para darle luz y contenido aunque sea apretando tornillos. Suerte!!!