Adivina, adivinanza…¿Quién soy?
MARIA PILAR MARTINEZ DE LA LLANALlevaba años fraguando mi plan. Había llegado el momento de entrar en acción. Únicamente necesitaba una vivienda en la que hospedarme. No era fácil menester pero, finalmente, había encontrado una de un material inmejorable. No necesitaba solicitar permiso para construir en suelo urbano. No tenía contactos, pero había llegado a este mundo de forma ilegal y así pensaba continuar el resto de mi existencia. Soy lo que hoy llamáis okupa, pero yo no ocupo inmuebles. Mi vivienda son vuestros cuerpos, humanos imperfectos. Soy el que consiguió confinaros, separaros de vuestras familias y amigos, el que pensó que acabaría con todos vosotros. Una lástima haberos subestimado. Nunca pensé que el ser humano sería tan resiliente y me conseguiría ganar la batalla. Ahora entiendo las últimas palabras del Juez de lo Penal nº 13 antes de llevármelo conmigo: “Se dicta Sentencia in voce: condenado a desaparecer”. Me voy. Ya me voy…
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Esperemos que se vaya para siempre y que no regrese ni él ni ningua variante. Mi voto y suerte.
Sí, seamos positivos. Dejaremos esto atrás como un mal sueño.
Muchas gracias.
La capacidad de adaptación del ser humano y el empeño colectivo merecen convertirse en ley. Este inquilino impuesto, que se las ha saltado todas, puede que también tenga derecho a subsistir, pero no a costa de otros. Las palabras del juez (otra más de sus víctimas) denotan firmeza y un vaticinio. Las del dichoso virus son la aceptación de su derrota en una guerra que nunca debería haber comenzado.
Un relato sobre un personaje tan presente que no es necesario nombrarlo, al que solo le queda la retirada.
Un saludo y suerte, María Pilar
Tienes toda la razón.
Gracias.
Un saludo.
Tu protagonista sí que es resiliente. Así no hay manera de echarlo. María Pilar.
Te deseo suerte y mi voto para que desaparezca pronto.
Besos apretados.
Muchas gracias.
Un abrazo.
Los humanos, capaces de lo mejor y lo peor. Sin duda acabaremos con él.
Un saludo, María Pilar
Eso es: conseguiremos ganar la batalla..
Un saludo.
“Condenado a desaparecer”, a hacer mutis por el foro. Hay que ejecutar ya, sin pretexto, la sentencia del Juez.
Mucha, y buena, suerte, Pilar.