Abogado estival
Marta Trutxuelo García El tiempo apremiaba. La súplica dibujada en el rostro de mi cliente me acuciaba. Así funcionaba mi mente, curtida en el oficio a golpe de juicio rápido, por lo que me lié la toga a la cabeza y me zambullí entre la multitud. Como medida cautelar usé mi capacidad para identificar sólo lo primordial y así hallé la información pertinente. El glosario explicativo era infinito pero mi poder de lectura rápida fue crucial para sentenciar de igual o más acelerada manera, si cabe
– ¡Mi héroe! Has encontrado mi favorito, aplaudió mi mujer cuando le llevé su helado preferido tras abandonar el abarrotado local del centro de Manhattan.
Otro cliente satisfecho… un buen abogado no descansa ni en verano.
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Ahora leo tu relato! Te dejo mi caluroso voto de agosto, jaja. Me ha gustado mucho el ritmo tan rápido que le has dado a la historia para agobiarnos como al pobre abogado. Abrazo y suerte.
Gracias, Eva!
Como siempre, un placer leer tus comentarios!!!
Un abrazo para ti también!
Marta
Eres muy buena jugando al despiste. Está visto que hasta pedir un helado lo procesamos como un litigio. Enhorabuena. Y un mantra.:»Soy Marta y debo descansar»
Je, je… eso haré Ángel!!! Acabo de volver de vacaciones, en el mismo sitio que el pobre abogado-agobiado, y necesito otras para recuperarmeeee!
Gracias y feliz verano!!!
Marta
Ese helado tuvo que saber a éxito total,jajaja
Felicidades Marta
Muchas gracias por pasarte, María Dolores!
Sí, síii… éxito merecido después de tanto esfuerzo, pobre abogado, ni puede estar tranquilito en verano… y encima, el helado no era para él!!! ja, jaaaa
Un abrazo
Marta
Hola, Marta.
Qué ganas tenía de volver para poder leerte e imaginar esa escena del letrado con la toga liada a su cabeza. Menuda locura manhatiana o martatruxuelana.
Un hombre así es para no echarlo en olvido. Genial locura, encantadora de ovejas (que no de abejas).
Un abrazo enorme y suertísima amiguita.
Welcoooome, Towiii!
Espero que hayas disfrutado y descansado a partes iguales en tus merecidas vacaciones.
Mil gracias por tus amabilíiiisimas palabras… para un relato tan precipitado y loco como el poco tiempo que le dediqué no se lo merecen, pero yo las agradezco de corazón!!!
Gracias, abejita reina!!!
Otro abrazo fresquito para que empieces bien el curso!!
Marta
Al filo de lo imposible cai, pero no te podía dejar sin comentario y sin voto. Un abogado de los buenos no descansa nunca. Sostienes divinamente la tensión narrativa en suerte de trampantojo donde todo cuadra al final.
Enhorabuena una vez más. Eres grande.
Un beso grande también.
Querido Edu!!!
Qué ilusión leer tu comentario, con tan amables y elogiosas palabras, como siempre!!! Gracias miiiil!!!
Espero que hayas pasado un verano fantástico… o que aún vayas a disfrutarlo… lo que sea, bienvenido será!!
Un fuerte abrazo y un besote aún veraniego!
Marta