GUERRA FRÍA
Eva María Algar GarcíaEn la cápsula de acceso al Congreso Supremo, escaneo el código QR de acreditación para teletransportarme a mi asiento. La grada bulle. El resultado de la votación de hoy, será determinante para los miembros de la abogacía. Las leyes deben regular las relaciones jurídicas entabladas con androides; no se puede obviar la realidad por más tiempo.
El murmullo y la iluminación disminuyen al unísono, cuando en el centro de la sala irrumpe el imponente holograma del Presidente. Destacando la extraordinaria versatilidad de los robots, asevera que ha llegado a su límite la innovación del hombre, quien debe aceptar la capacidad transformadora de la inteligencia artificial en la sociedad, tan ostensible en el ámbito jurídico.
Queda aprobada por unanimidad la supresión del código CAPTCHA en las contrataciones, y el otorgamiento a los androides de personalidad y capacidad de obrar plenas.
El futuro es nuestro. Si fuera humano, lloraría como un niño.
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Evaaaa… aupa por tiiiii!!! Ves??? Sólo tenías que echarle imaginación… y mira que peaso relato futurista te ha salido, con una ambientación perfecta… si el de Towi es 3.0 el tuyo 7.0 al menos, je, je….
Me ha encantado!!! Muchísima suerteeee!
Y te mando mi cibervoto, cómo noooo!!!
Enhorabuena, amigaaa!
Un beso
Marta
Mil gracias, Reina de los Cuentos! Dicen que más vale tarde que nunca! Al final llegó la inspiración. Solo tuve que verme la saga de Star Wars tres veces, jajaj Besos y feliz puente, si lo tienes. Muac!
¡Qué bueno!
Muchas gracias, Margarita! Suerte con tu «iletrado».
Jajajaja, qué bien contado.
Un abrazo enorme y muchísima suerte.
Te mando un holovoto.
Muchas gracias, encantadora de abejas! Me gustó mucho tu micro y te voté, pero, sinceramente, tenías tantos comentarios que no supe qué añadir! Te mando un holobeso tan sincero como el de PericleX.
Ñam ñam, gracias!!
Leyendo tus relatos siempre pensé que eras una máquina. Ahora tengo la prueba. En cuanto te han reseteado te ha salido un relato genial. Eres una versión androide de ultimísima generación
Ángel, me has pillado! El caso es que no quería confesarlo por si no me dejaban participar, pero puse la foto de una humana que parecía simpática y hasta ahora había dado el pego, jajaja. Eres genial. Abrazo metálico.
Está claro que los androides (o replicantes de Blade Runner) necesitan un corazón. Así podrán llorar cual niños. Y recordar realmente, puesto que en la palabra “recordar” está presente el corazón (“cor”); que no en vano los ingleses y franceses aprenden no de memoria, sino “por corazón”. Pero no es suyo el futuro de los androides, lo es ya el presente, si es que la velocidad del tiempo actual permite habla de presente o futuro.
Suerte, Eva María.
Necesitan un corazón como el Hombre de hojalata, de el Mago de Oz.
De el Mago de Oz
de El Mago de Oz. ¡Por fin!
jaja, muchas gracias por tu voto, Manuel. En cuanto a tu comentario, la reflexión bien podría ser objeto de otro relato. Ciertamente, la tecnología avanza tan vertiginosamente en los últimos años, que no solo sentimos que el presente vuela, sino también el futuro! Habrá que inventar otro término que defina un tiempo más lejano. Saludos.
Mucha suerte con tu micro, Eva.
Me parece muy bueno.
Mi voto para tí.
Muchas gracias, Ana. Me alegro de que te haya gustado. Espero leerte pronto.