El pájaro rebelde
Marcos Pérez Paz · HuelvaA las 19:52, Carlos Parquer, el eminente abogado que había convulsionado al mundillo jurídico con sus cada vez más heterodoxos planteamientos, -compilados en ese revolucionario superventas “Expropiación bebop” que había desatado tantas pasiones como rechazo-, hojeaba sereno el artículo que en La Razón le había dedicado su más reputado detractor,“…..usufructos desufructuados, dación gelatinosa, caducidad hidrogenada….., ¿dónde llegaremos?…., el derecho ha seguido –y así lo señala su nombre-, un camino recto como el acueducto que se vislumbraba desde el foro romano….etc, etc, etc». Sin mudar su serenidad plegó el periódico sobre la mesa, pulsó el botón de play, dio media vuelta a la silla y cruzó sus manos delante de la boca como si aferrase un saxofón. Así, meditabundo, observó el disco rojo que reverberaba a poniente mientras su alma transitaba de noche por Túnez.