Carta de despedida

Pedro Antonio Herreros Rull · Jaén 

Querido amigo, ha llegado mi turno. No montes ningún cirio por mi ausencia puesto que he cogido boleto voluntario para partir hacia rumbo desconocido con la esperanza, como todo viajero, de un mundo mejor. Me marcho con la sensación de haber errado de oficio, pensando que no hice buen negocio eligiendo una profesión en la que si se ha ganado un pleito siempre ha sido porque el cliente tenía razón, recayendo en mi conciencia, con igual frecuencia, la culpa de aquellos que no corrían igual destino. Tengo la percepción de que en cada caso he dejado parte de mi vida y que ésta ya no soporta siquiera sea un pequeño monitorio. Es por esto que, dichoso, he decidido casarme con la muerte en busca del sosiego que en vida jamas he tenido.

 

0 Votos

 

Queremos saber tu opinión