ABOGADO DE PELÍCULA
William Teixeira CorreaMi padre, economista y bastante tradicionalista, siempre me decía: “Hijo mío, lo más importante en la vida es promover una sociedad productiva, inclusiva y con pleno empleo, donde se aspire a mantener un crecimiento sostenido”. Pero yo siempre fui fantasioso y soñador, como mi madre, que era actriz. Y aunque al final elegí una profesión tradicional, como él, nunca dejé de soñar con ser un personaje de película y vivir experiencias extraordinarias. Quizás por ello por mi despacho ha pasado un “hombre araña” detenido por escalar edificios públicos, una sirvienta abusada por su madrastra, un jorobado que invadía iglesias para tocar sus campanas, y hasta un payaso asesino. Sin embargo, quien más me marcó fue, sin dudas, “El Camaleón”. Experto en robo de identidad, hoy, gracias a mí, está libre; mientras que yo, cuando no estoy levantando pesas o planeando mi venganza, mato el tiempo escribiendo microrrelatos en mi celda.
+8
Queremos saber tu opinión
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.
Extraordinario relato, curioso, ágil y divertido. Un auténtica fantasía y sueño. Pura imaginación. Me ha sorprendido muy gratamente. Suerte y mi voto, por su merecimiento. Un abrazo,
Hola, Francisco. Muchísimas gracias. Me alegra mucho que te haya gustado. Y ahora debo irme, que el guardia me está llamando. Un abrazo grande desde el continente americano.
De cuento. Y con final feliz para los que tenemos la suerte de leerte.
Hola, Margarita. Muchísimas gracias. Es bueno saber que alguien disfruta de estas historias disparatadas que escribo. Un beso y hasta pronto.
Muy original tu micro. Espero que el abogado pueda pronto recuperar su identidad. Mi voto y enhorabuena!!
Hola, Juan. Muchas gracias. Ya me las pagará ese impostor. Saludos desde el otro lado del Atlántico.
Un relato impresionante, en el que cabe toda una novela que bien merece un desarrollo. Enhorabuena y mi voto. Un saludo.
Hola, Nicolás. Muchas gracias. Espero que en el futuro se lleve a la pantalla grande y Joaquin Phoenix se interese por interpretarme. Un gran abrazo.
La literatura, tanto la propia como la ajena, es una tabla de salvación por el entretenimiento que supone si las horas son demasiado largas, tediosas e impuestas. Tu protagonista lo sabe bien. Ese tiempo que «mata» en su celda, en realidad y de forma paradójica, está bien lleno de vida.
Te envío un saludo hasta el otro lado del Atlántico.
Una muy interesante reflexión. Otro abrazo para ti desde este lado.
Sigue escribiendo, lo haces muy bien.
Hola, Luis. Muchas gracias. Mientras siga preso, seguiré escribiendo. Un abrazo.
Espero que la fantasía le haga más llevadera su condena.
Buen micro- Mucha suerte y te dejo mi voto.
Besos.
Hola, Pilar. Muchas gracias. No te preocupes, mi fuga es inminente. A pesar de ello, gracias a vuestros comentarios, quizás siga escribiendo fuera de la prisión. Besos.