Pedro Antonio Herreros Rull
Microrrelatos publicados
Toga sin género
Aquella pregunta siempre me resultó muy inquietante por recurrente. Al principio solo me la hacía cada aniversario, después todos los meses y últimamente todos los puñeteros días: ¿Por qué contraje matrimonio contigo si sabía que ibas a delinquir?. No necesité cotejar con nadie mis impresiones, sabía cien por cien que lo ibas a hacer. Y lo has hecho, ¡vaya que si lo has hecho! Mi cuerpo yace ahora en el suelo, inmerso en un amapolado mar de mi propia sangre. No tengo fuerzas para levantarme y, ahora que abandono este mundo, en este baile de sensaciones, solo puedo decirte que siempre te amé, que te quise por encima de todo, que mi amor hacia ti fue ciego pero que, como ya te advertí, jamás utilizaría mi toga para defender tu falta de escrúpulos.
| Octubre 2024
Participante
Votos recibidos por la Comunidad: 16Boda de plata
Has estado pergeñando durante muchas horas la defensa. Es fundamental eludir al máximo las improvisaciones. Nunca ves el fin. Continúas repasándola una y otra vez. Solo piensas en el triunfo; como tu compañero, imaginas. Llega tu turno. La toga te da seguridad. Decidido, te diriges con orgullo hacia el lugar que te corresponde. Con la venia Señoría, comienzas. En ese justo momento alzas tu cabeza y miras a tu desconocido oponente. Sus ojos te encandilan. Te distraes, pierdes la concentración, no sabes qué te está pasando, comienzas a sudar, es frío. Estás muy nervioso, te sonrojas, balbuceas, tu discurso resulta irracional. Asustados, todos te quieren ayudar. Nadie ve la flecha de Cupido, solo vosotros. Creen que padeces un infarto, un ictus ... algo muy grave. Pretendes tranquilizarlos, pero no puedes. Hoy, con los tuyos, rememoras con nostalgia aquel pleito perdido y tu boda de plata.
| Julio 2023
Participante
Votos recibidos por la Comunidad: 15RARA PATOLOGÍA MUSICAL
Tengo una rara patología. A determinadas impresiones surge música en mi mente. No lo puedo remediar. Mi mente se evade y dependiendo de cada sensación comienza como un automatismo una distinta sintonía.
El día que juré como abogado, sonó el himno de la alegría. En mi primera vista oral, al tomar la alternativa, escuché clarines y timbales. En la confrontación, los Sex Pistols. Y si intento mediar buscando el consenso, “Imagine” de John Lennon.
Cuando espero alguna sentencia o cualquier otra importante resolución, Ennio Morricone se apodera siempre de mi cabeza con “Un puñado de dólares”. Si es desestimatoria, “Another brick in the wall” de Pink Floyd, pero -al pensar en la apelación- rápidamente la interrumpe “Nessun Dorma” interpretada por Pavarotti repitiendo en un alarde de voz el “vincere” final. El “Aleluya” de Leonard Cohen, únicamente al ganar con costas.| Enero 2023
Participante
Votos recibidos por la Comunidad: 6