María José García López
Microrrelatos publicados
A duras penas
El juicio estaba derivando en un auténtico guirigay. Uno de los abogados había retomado su argumentario por tercera vez consecutiva con la voz hastiada. Los insultos que se cruzaban entre ambas partes le hicieron enseguida enmudecer:
-¡Sinvergüenza!
-¡Mentecato!
El juez mandó guardar silencio e instó al letrado a continuar, que hizo su exposición con la mayor de las premuras por temor a verse silenciado de nuevo.
"Y ahora me toca a mí salir a escena, con lo mal que llevo este caso", pensé. "Qué necesidad tienen de litigar si...".
Otro insulto, otro más y correlativo a aquel, un bofetón.
Vista aplazada para la semana próxima y un gran suspiro de alivio por mi parte. Menos mal.| Abril 2017
Participante
Votos recibidos por la Comunidad: 2Un caso complicado
Desperté. Tenía completamente seco el gaznate, la nuez de mi garganta me raspaba como una espina de pescado a cualquier sonido gutural que hiciese. Entré al baño y me sequé el sudor frío de mi frente con una toalla. Intenté abrir la llave del grifo.
Nada.
Entré de nuevo en la habitación. Todo estaba en su sitio: el ordenador, el teléfono... Pero, ¿y la carpeta del caso? Miré el reloj, el juicio era en menos de dos horas. Mi predecesor me advirtió de la posibilidad de que me ocurriese algún incidente.
-Es un tema complicado, demasiados intereses Carlos, probablemente sea tu último caso como abogado.Sus palabras me martilleaban la cabeza y por más que me esforzaba en recordar, no sabía lo que había pasado. Antes de volver a desmayarme, un dolor terrible de espalda me hizo caer de bruces contra el suelo.
| Agosto 2016
Participante
Votos recibidos por la Comunidad: 6