Francisco Rodríguez Criado
Microrrelatos publicados
EN LA ESCENA DEL CRIMEN
–Interesante... ¡Whisky añejo de malta! –sentenció con fino olfato.
–¿Alguna pista, señor? –preguntó su ayudante, intrigado.
–¡Elemental, querido Watson: este hombre tenía un gusto exquisito!
Watson miró cariacontecido al eficiente Sherlock Holmes, a cuyos pies se encontraba el cadáver de un famosísimo abogado, un maestro de la negociación para quien la ley no tenía secretos.
El detective había adivinado sus pensamientos.
–No, querido Watson, no murió envenenado, y tampoco en este bufete. Trajeron aquí su cuerpo para confundirnos. Mire en derredor, borre mentalmente todas las pruebas falsas y obtendrá la identidad del asesino.
¿Pero por dónde comenzar…? Watson miraba y borraba con la mente, sin encontrar rastro del asesino del letrado.
–No se impaciente –sonrió Sherlock Holmes, con pose artificial, sirviéndose una generosa copa de whisky–. Se lo contaré todo. Pero deme algo de tiempo, querido amigo: esta historia no cabe en un microrrelato de 150 palabras.| Enero 2024
Participante
Votos recibidos por la Comunidad: 11Escarmiento
Bien porque es abogado, bien porque el orgullo le puede, a mi marido le encanta enfangarse en pleitos, incluso fuera del bufete.
Yo lo dejé en la charcutería del centro comercial mientras iba a comprar los yogures, y cuando regresé estaba discutiendo con una señora porque “ella no había respetado el turno”.
Conciliadora, traté de ayudar a rebajar la tensión, pero mi marido erre que erre, como si estuviera litigando en un macrojuicio televisado.
Y quién empezó la pelea, si mi marido o el de la señora, no lo sé, porque me fui a la sección del café huyendo de aquella concentración de curiosos. Pero así, en "petit comité", le diré algo fundamental: Estoy harta. Si usted le da un susto a este hombre, no me enfadaré, señor juez. Y mire que malo no es, pero bien porque es abogado, bien porque el orgullo le pierde, necesita un escarmiento.| Julio 2023
Finalista
Votos recibidos por la Comunidad: 36