MALDITO REGALO DE REYES
Modes Lobato MarcosEntró en mi despacho con síntomas de agotamiento.
Me dijo que su vida había consistido en una permanente donación de risas y humor, sin recibir nada a cambio.
Y estaba harto de sentir, con una cadencia diaria, mensual, anual…, cientos de golpes en todo su cuerpo.
Tan pronto le atizaban con el teclado del ordenador, como lo arrojaban desde un precipicio.
Tan pronto lo golpeaban con una roca gigante, como lo tiraban desde un avión sin paracaídas.
Y todo el tiempo corriendo, saltando, subiendo, bajando…
Tras escuchar sus palabras, admití que no tenía sentido debatir quien llevaba razón en este caso, pues era evidente.
Por eso acepté defenderlo.
Entonces, con lágrimas de emoción surcando su rostro, me abrazó mientras murmuraba: «No sabía que pudiese llorar».
Y así, aquella mañana, conocí al primer dibujo animado que logró escapar de un Cinexin.
+5
Queremos saber tu opinión
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.
Muy bueno, Modes. Original y bien escrito. No creo que muchos por aquí sepan lo que es el Cinexin … el mío lo tengo guardado en el baúl de los trastos olvidados. Gracias por despertar su recuerdo.
Pues como hable del Ibertren, o del Tente, o del chicle Cheiw…, van listos.
Me ha quedado un relato de lo más vintage.
Gracias por leerlo y comentar.
Un saludo.
Defensor de causas perdidas y halladas en el baul de los recuerdos. Así es imposible no animarse a darte un voto. Y un aplauso.
Gracias por ese voto y ese aplauso, Margarita.
Karina forever!
Ay Cinexin de mis amores…