LOBOTOMÍA
Ángel Montoro ValverdeLOBOTOMÍA
Las intervenciones de corazón no dieron el resultado esperado porque no era un problema de compasión. Por ello, al jefe de recursos humanos le rasuraron la cabeza y limpiaron el área para retirar el cuero cabelludo, perforar el cráneo y acceder al cerebro. El cirujano extirpó de inmediato los prejuicios tumorales: el “inútil” del lóbulo parietal derecho y el “pobrecillo” del izquierdo. Cauterizó vasos sanguíneos inyectando un anticoagulante para promover la conexión neuronal del pliegue del crecimiento empresarial productivo con el del empleo inclusivo. El toque maestro fue cuando, con ayuda del abogado, inoculó el artículo 42 de la Ley de las personas con discapacidad y se diluyeron al instante las expresiones invasoras “anormal”, “tullida” y “tarado”. Al poco tiempo, cuando la chica de recepción recién contratada se ajustaba el sonotone con una sonrisa, comprendimos que la operación había sido un éxito.
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Un relato magnífico, compañero. Contundente y resolutorio. Habrá que plantearse lo de la lobotomías para eliminar de nuestra cabeza tanta tontería. Enhorabuena y mi voto.
Gracias Nicolás
Te felicito, Ángel, es una maravilla de historia, aunando, ley, neurociencia y arte para escribir.
Gracias. Y enhorabuena por tu micro
Tenemos tan arraigados los prejuicios y las etiquetas simplonas, que nuestro cerebro carece de capacidad por sí mismo para mirar más allá y ver la realidad con justicia. No vendría mal un ajuste en esa máquina orgánica que, según nos cuenta la ciencia, la biología y la evolución, es tan perfecta, pero a menudo deja bastante que desear.
Un relato muy original, con unas descripciones llenas de fuerza.
Un saludo y suerte, tocayo
Suerte a tí también
Es una alegría leerte, Ángel.
Una alegría y un frenesí.
Y releerte, más.
Agradezco tus palabras escritas, supongo, entre premio y premio. Te sigo.
Hola, mi querido Ángel.
Dicen que no hay dos sin tres, pero yo rectifico el dicho: no hay tres sin cuatro.
Cuatro grandes microrrelatistas y amigos tocan el tema de la discapacidad con cuatro visiones a cuál mejor. En este mes y con vuestros cuatro micros no sabría por quién de vosotros decantarme.
El tema me emociona y me duele en carne propia.
Esas expresiones atroces que, todavía, se escuchan deben ser eliminadas de nuestro vocabulario al grito de ¡ya!
Perdona que me ponga mitinera, pero… no lo puedo evitar.
Campeón, muchísimas felicidades por tu historia.
Un abrazo gigantesco.
Sé que lo vives en tu carne. Y yo. Por eso agradezco más que nunca tu abrazo gigantesco.
Ángel!!! Fantástico tu relato… aplaudo el tema, la forma y el fondo!
Y le hago un sitio a tu recepcionista para que pose junto a mi «María»… encantada!
Un abrazo, Ángel!
Suerte y enhorabuena!!!
Marta
Gracias Marta. Tu eres la sonrisa eterna.
Un relato muy original. Me encanta.
Suerte, Ángel.
Un voto para el micro y un abrazo para tí.
Agradezco tus palabras. Son como un eco del bosque donde te escapaste en el mes de enero.
Qué alegría leerte de nuevo, Ángel. Hemos echado de menos tus letras, pero regresas con un gran relato. Te deseo mucha suerte y te dejo mi voto.
Besos apretados.
Gracias Pilar. Os echaba de menos.
Buenísimo
Gracias Luis
El relato me parece magnífico, pero la lobotomía no se la deseo a nadie. Pobre Rosemary Kennedy, como la dejaron.Mi felicitación y mi voto.
Bueno…ja,ja, realmente era una operación de cerebro. Lo de la lobotomía era por dar más fuerza al relato. Agradezco de corazón tus palabras de aliento.
Ángel, un placer leerte. Esta lobotomía ha sido un éxito. Creo que hay muchas personas que la necesitarían también, en nuestra vida diaria ha y demasiadas personas que muestran rechazo a las personas con discapacidad.
Me ha encantado.
Te deseo mucha suerte y te dejo mi voto.
Espero coincidir en marzo, este mes no voy a estar por aquí.
Un abrazo.
Gracias maestro.
Una operación de lujo. esperemos que pronto la sufrague la Seguridad Social. Voto al canto y deseos de suerte.
Tuve vocación de médico y luego me incliné por el Derecho. Creo que no se me hubiera dado mal ser cirujana en esa especialidad. Enhorabuena por ese baño de realidad tan original.
Gracias Esteban. sigue con tu buen humor. Se agradece en este valle de lágrimas.
Gracias María.
Ánge, enhorabuna por el éxito de la operación, no era sencilla y las has resuelto con solvencia magistral.Voto.