Imagen de perfilLA TAPADERA

JUAN ANTONIO TRILLO LÓPEZ 

Las autoridades españolas habían recibido el soplo de un posible tongo e incluso sabiendo la gran polvareda que levantaría su decisión, enviaron como representantes a un inexperto grupo de jóvenes que no obstante ya ocupaban destacados puestos como fiscales y juristas. Su misión, además de intentar pasar desapercibidos y procurar no hacer demasiado el ridículo, sería investigar al panel de jueces bajo sospecha y obtener pruebas para poder acusar a la organización de fraude y corrupción. A pesar de que recabaron contundentes indicios de delito, finalmente el Tribunal de la Unión Europea en un discutidísimo fallo, dictó el sobreseimiento de la causa aduciendo defectos formales. Pero ese farragoso laberinto burocrático ya estaba olvidado, más aún cuando toda España conmemoraba el primer aniversario de aquel épico triunfo contra todo pronóstico y el mundo entero rendía pleitesía a The Hispanic Picapleito’s, los sorprendentes ganadores de la última edición del Festival de Eurovisión.

 

+16

 

Queremos saber tu opinión

1 comentario