EL LETRADO ANTONIO II
SANTIAGO MESSA POULLETRosario atesoraba cuatro años de ocupación ilegal del portal del cajero de la populosa calle Larios. Era exquisita y respetuosa con el entorno; amontonaba sus pertenencias en un modesto carrito de la compra y se ausentaba en horario comercial de mañana para retornar cuando el fresco y marino atardecer subía por la céntrica vía. Aquella mañana el pertinente juzgado había decretado el desalojo de la vulnerable diógenes y a las 8 de la mañana un ingente tropel de policía invadió el entorno del portal. Para asistir a la defensa de Rosario, el letrado Antonio tuvo que desarrollar una batería de recursos legales y leguleyos. Sin duda era un abogado beneficiario de una sabiduría del derecho a la dignidad con marcada orientación… a la humanidad.
Su alegato en defensa de Rosario emocionó hasta a la estatua del Marqués, que lloró lágrimas de piedra cuando sacaron a empujones a su indigente vecina ocupa.
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Las andanzas de tu letrado continúan agrandando mi simpatía. Gran relato, gran historia. Enhorabuena y mi voto.
Gracias Nicolás por tu voto y por tus palabras de apoyo y calor al letrado Antonio. Sin duda él habría hecho suya la defensa al pertinente galileo.
Lo dicho… gracias
Seguro que este abogado, que sabía valorar la dignidad y la humanidad, hizo la defensa más brillante posible, pero a veces la ley se aplica con todo su rigor, sin que pesen como debieran condicionantes y circunstancias, sin piedad.
No es difícil imaginar a este letrado, lleno de capacidad y buenas intenciones, buscando una solución habitacional para su clienta, posiblemente ella encuentre un lugar mejor que aquel cajero.
A menudo imaginamos a los superhéroes con capa y superpoderes, no nos paremos a pensar que los verdaderos pueden vestir como cualquiera de nosotros y llamarse Antonio.
Un abrazo y suerte, Santiago
Los héroes con más mérito son los que hacen suyas causas cotidianas de forma discreta… sin ruidos… sin estridencias. Como bien dices no necesitan capa, a lo mejor una bonita toga-
Gracias Ángel por tus palabras y tu apoyo.
No me extraña que llore la estatua. Entrañable relato.
Es un icono en Málaga la estatua del Marqués de Larios, por eso sus lágrimas tienen más valor.
Gracias por tus palabras Margarita.
Hermoso relato, recuerda «A la sombra de un león», maravillosa canción de Sabina.
Tienes mi voto.
jajajajja ya quisiera aproximarme David; preciosa canción y preciosa la versión que hicieron sabina y Ana Belén. Mi historia no tiene un Banco Central donde chocar… pero tiene un cajero donde construir los sueños del letrado Antonio.
Gracias y un saludo
Yo es que es nombrar la calle Larios y se me abren las carnes. Me encanta lo de llorar lágrimas de piedra. Ánimo para redactar un Antonio III. Mi apoyo para que seas el más votado y un abrazo.
Muchas gracias Esteban eres muy amable y sí, el letrado Antonio merecerá si supera el filtro duro selectivo, un tercer episodio que será su epílogo.
Todos debíamos ser un poquito como él.
Gracias por tu apoyo
Mi enhorabuena por tan emotiva historia. El abogado hizo todo lo que pudo pero a veces la humanidad no tiene peso ninguno por mucho que llore la estatua. Mi voto y suerte.
Gracias Juanma por tus amables palabras. El letrado ANtonio no pudo evitar el desalojo aunque estuviese cargado de razón… o no, pero estuvo ahí, esa es su lección su elección. LA estatua bastante tuvo con llorar
LO dicho, gracias
El letrado Antonio nos lleva de nuevo por Málaga, la calle Larios y la estatua del marqués, un magnífico escenario para tan triste final de la entrañable ocupa. Me hubiera gustado un final feliz, pero así es la vida y la realidad que vivimos.
Enhorabuena y suerte, tienes mi voto y un saludo.
El letrado Antonio hace lo que puede. Lucha contra gigantes molinos y aunque tenga la razón… La realidad lo coloca en un lugar extemporáneo. Su alegato fue papel mojado. Espero que todo se arregle en la tercera parte y epílogo del personaje.
Gracias por tu voto y tus palabras
Leyendo tu espléndido relato, vienen a mi mente recuerdos, emociones y olores de esa maravillosa ciudad del Café de Chinitas, y ya que tu protagonista es una indigente, por lo menos tiene la suerte de serlo en una cálida y agradable ciudad. Me ha emocionado y por ello ha merecido mi voto, que ya te otorgué hace días. Un abrazo,
muchas gracias Francisco, por tus afectuosas palabras y sí, siempre que puedo hago un poco de patria local. La ciudad del paraíso que glosó Vicente Aleixandre ha tenido ilustres indigentes como el Piyayo con ese precioso poema de José Carlos de Luna. Lo dicho,a disfrutar de Málaga cuando se pueda.
Un abrazo
De nuevo Málaga, tu Málaga, nuestra Málaga, como foro por excelencia (está desterrando a Madrid).
Mi voto, Santiago.
gracias paisano. Una de boquerones, un espeto en un chiringuito y un moscatel en casa guardia. Abrazos malaguitas