POR FIN SOY LIBRE
MONICA CRISTOBAL ALVAREZ Yo tenía mi argumentario para los clientes que me mandaban consultas por whatsapp:
«Pide cita porque, como el médico, para valorar la fractura debo ver la radiografía”.
“Por este medio no contesto asuntos profesionales”.
Pero era inútil. Hasta que un mentecato me mandó: “k hago con sto?”, y una foto adjunta. Abrí el archivo y vi al socio del sujeto, a pie de obra, con una pala incrustada en la cabeza y los ojos abiertos a la muerte.
Le contesté con la foto de una tumba que, como correlativo, encontré “on line” con el móvil a la palabra fallecimiento. Y con la premura de mi respuesta, el sujeto hormigonó el cuerpo.
A él acusaron de asesinato y a mí de encubrimiento. Desde la cárcel, intenté litigar contra el atosigamiento que estamos sufriendo los abogados con las nuevas tecnologías y perdí.
Pero aquí no hay cobertura.
Por fin soy libre.
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Jejeje.Te voy a atosigar, pero con un comentario: ya solo faltaban las nuevas tecnologías para bombardearnos con consultitas jurídicas. Así que habrá que seguir el ejemplo del protagonista de tu micro.
Suerte, Mónica.
Jaja Es cierto que nos están bombardeando a consultas entre el móvil, el email y el ws. Es una barbaridad el tiempo que se pierde y al final contestas rápido y metes la pata…
Gracias!!!
Mónica, transmites perfectamente el acoso que padecemos los abogados a cuenta de las nuevas tecnologías y aparatos.
Me ha gustado tu relato, una forma original de exponer el tema.
Tienes mi voto.
¡Suerte!
Yo he pensado poner incluso en la hoja de encargo profesional «no se atenderán consultas por mensajes de móvil» pero se que es inútil. Habrá que bloquear al cliente en whasapp según firme el presupuesto con «cariño» y previo aviso. ¡¡No veo otra opción!! Gracias!!
También tienes mi voto. Te felicito por la sencillez con la que eres capaz de expresar tanto. Auténtica literatura/literata Suerte