Circunstancias
Miguel Angel Arana Martínez · PamplonaEl juez escuchaba mi informe sin dar el menor indicio de interés. Su cabeza calva, firmemente incrustada entre los hombros, asemejaba la de una tortuga que se resguarda de la lluvia en su caparazón. “Lo cierto es que el Ministerio Fiscal no ha probado que mi cliente estuviera en la escena del crimen.” El magistrado se giró y me dijo: “¿Cómo que no?” Me dejó perplejo. No es habitual que te interrumpan en medio del alegato final. “¿Y la prueba de ADN sobre el semen?”. Me aclaré la garganta, pero me salió un falsete: “Es circunstancial”. “Yo más bien diría subnormal”, espetó su señoría. Me quedé sin habla. “¿Nadie le ha explicado a su cliente que el calcetín no se pone ahí?”