Gulliver
David Villar CembellínMe hago gigante en casa. De puertas para adentro torno un titán, un coloso, una criatura de hombros descomunales. Siempre existe algo, además, para mi enfado. Cruzo el umbral y comienza el baile de descalificaciones. Que si la sopa está fría, que si la alfombra está sucia, que a mí qué narices me importa que sea hoy nuestro aniversario. Mi voz estentórea rebota en las paredes y no pocas veces veo necesario levantar la mano. Así de grande soy.
Hoy, sin embargo, me siento distinto. Los alógenos de los juzgados emiten una luz que me empequeñece. De manera inquietante me hacen saber que, por lo visto, insultos y amenazas son formas de delinquir. La parte fiscal logró cotejar el informe pericial de malos tratos y encojo varios centímetros cuando me enseñan fotografías de un ojo amoratado. Ahí disminuyo sobre el banquillo, desaparezco, me vuelvo diminuto. Un gnomo menguante. Un liliputiense.
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Maravilloso.
¡Muchas gracias!
Sobresaliente analogía al clásico! Bravo!
¡Gracias por tus palabras!
Me gusta la estructura circular, la configuración orbicular, que el relato se doble sobre sí mismo como un uróboros.
También me gusta la denuncia social que hace. Me temo que en el mundo abundan gigantes que en fondo no son sino minúsculos aprendices de maltratador.
Felicidades.
Muchas gracias, José Ignacio, por tomarte un tiempo para leer mi relato
Enhorabuena, David. Estupendo relato. Merecedor de estar en el pódium. Con mi voto ya son 5 y espero que sean muchos más. Suerte con el jurado. Saludos.
Gracias a ti por tus amables palabras, José Manuel.
Felicitaciones por tu forma de contar en apenas 150 palabras el drama real que se oculta en la intimidad de muchos hogares.
Gracias a ti por tu sensibilidad, Montse.
Me gustó mucho felicidades
Mila esker!!!
Co-lo-sal.
Significa mucho viniendo de ti. ¡Muchas gracias!
David, un relato absolutamente impecable. Enhorabuena y mucha suerte. Un salud
Salud para ti también, Nicolás.
; )
¡Excelente, brutal!
¡Muchísimas gracias!
Por sinergia con tu comentario hacia mi micro, me veo compelido a decir que lo bueno se sirve en frascos pequeños. La brevedad de tu relato acompaña a un gigante, empequeñecido por las consecuencias de su abuso. Es una subida, para volver a bajar y el título le viene bien ajustado. Sin duda, se trata de otro monstruo, ese tu personaje. Bravo por tu micro, que se perfila ganador este mes… Suerte, David…
Muchas gracias por tus palabras, Francisco Javier.
This micro-story is a witty twist on the classic tale of Gulliver, presenting a fresh take on his adventures that keeps the reader engaged with its clever wordplay. Short and punchy, it makes you appreciate how much can be packed into so few words. If you’re curious about unique micro-literature, just google «Gulliver» and you’ll discover many variations of this timeless character.
Thank you, I guess.