Sin retorno
Hector VillanuevaCuarenta y cinco, así me llaman acá. Ellos, simplemente cumplen una función. Evitan relacionarse conmigo, y lo entiendo, es su trabajo.
La rutina, cabalga entre lo monótono y estéril. Ellos, asiduos respetuosos de los pactos, me despiertan con el alba. Al levantarme, me aseo y espero el desayuno. Después leo, luego leo y releo… algunas veces, recito párrafos de la novela “Un abogado en aprietos”.
Posterior al almuerzo, seguro imaginas que retorno a la lectura, pero no, simplemente, suelo formular preguntas…que nadie responde.
En la cena, enciendo la radio y me mantengo conectado con el exterior, mi único privilegio.
En otra época, ésta no sería mi costumbre, por el contrario, encendería la tele y disfrutaría, mientras absorbo un té de lavanda… cosa que extraño…
A las 20 horas, apagan las luces… cierro los ojos y trato de olvidar que soy un reo, condenado a perpetua…
+16
Queremos saber tu opinión
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.
Hola Héctor. Saludos, muy interesante.
Hola Astrid,muchas gracias por el apoyo…
Quizás, entre lectura y lectura encuentre el mejor modo de evasión posible: la imaginación.
Enhorabuena, me parece un micro fomentador de la lectura.
Abrazo.
Gracias mi estimada María Sergia…Tu talento se desborda en este extraordinario comentario:
«Quizás, entre lectura y lectura encuentre el mejor modo de evasión posible: la imaginación»
La lectura es magia
Así es Alba…
La lectura es un viaje sin retorno…
Amigo Héctor, no me quiero imaginar lo que vivió Andy Dufresne en «Cadena Perpetua» cuando lo metieron en el «agujero». Sobrevivió tocando melodías de Beethoven en su cabeza… Tu micro me evoca esa mítica película. Tienes mi voto y mi enhorabuena. ¡Suerte!
Muchas gracias Francisco.
Me alegra que te haya gustado…
Encuentro fascinante abrir un libro y dejarte envolver. Fantástico micro.
Así es.
Cierto
Me alegra que te haya gustado María Teresa…Abrazos
Nadie puede poner rejas a la imaginación. tienes mi vcoto.
Muy cierto Ángel
Gracias por tu voto