LA LEY DEL MAR
TERESA GALLART RAMIRO · GIJÓN (ASTURIAS)Sr. Capitán, antes de ser lanzado al mar desde este hermoso bergantín, quisiera yo esgrimir las razones de lo que ahora es mi trajín. En mi defensa he de alegar que nunca antes perdí un botín y aunque soy bizco y cojo para las mujeres tengo buen ojo. Yo me apoderé del Tesoro de su Majestad, pero ella me robó la voluntad y a pesar de ser buen bucanero en sus redes caí prisionero. Ahora soy un pirata enamorado que la Ley del Mar ha vulnerado. No hay razón ni argumento que justifique mi desistimiento. Mas si un duro castigo me queréis imponer no me lancéis por sotavento dejadme vivir mi sufrimiento pues el amor es mi mayor tormento.