TENAZ
IV¡µN HUMANES BESPí–N · CORNELL¡µ (BARCELONA)El funcionario, desde el otro lado de la reja, le conmina a despertarse. Han pagado su fianza, le dice. Ya puede ponerse bronceador si quiere disfrutar del sol de estas islas, le anima el abogado, justo al lado del funcionario, y haciendo una llamada a su socio para comunicarle la noticia. Espabile, dice el funcionario. Si quiere que le haga un resumen, le habla el abogado, el juicio penal está encarrilado, además tenemos un acuerdo de condonación de la deuda en civil, le aclara. Puede despertarse, repite el abogado. Despiértese usted, habla por fin el prisionero. Y el abogado, tenaz ante todo, prefiere soñar que gana su primer juicio.