Crisis e ingenio
Teresa Arjona Calvo · Benidorm (Alicante)El ginecólogo lo confirmó: estaba embarazada. La crisis económica la tenía asfixiada: subida de Impuestos, E.R.E que la dejó sin trabajo, plazo perentório para abonar los recibos de luz pendientes, resolución contractual del «nidito de amor» que él dejó de pagar cuando ella se negó a abortar… Del susodicho sólo sabía que estaba, según él, en trámites de divorcio, y que trabajaba, como abogado, en aquél edificio ocupado por prestigiosos despachos. Como hasta su nombre resultó ser falso, optó por meter copias del anónimo panfleto en todos aquellos buzones, con una escueta dirección: Sr. Abogado.(Confidencial). En cuatro días el cajetín del apartado de correos estaba lleno, a rebosar, de sobres con la cantidad de dinero solicitada » para mantener en secreto tu paternidad…». Miró los soberbios edificios de la Gran Avenida (constructoras, brokers, políticos, Bancos…).»¿ Y por qué no ?» se dijo, sonriendo picaramente…