Almudena Horcajo Sanz

Microrrelatos publicados

  • VIUDOS VIRTUALES

    Soy una persona muy familiar, me desvivo por los míos. Cuando lo necesitan, me ofrezco para ser su abogado, no les cobro, me basta con su agradecimiento. Ayer me llamó afligida mi prima Florentina, había perdido a su marido. Me quedé de piedra. Al parecer, hace un año se enamoró locamente de un robot con el que se casó en una ceremonia virtual. Desgraciadamente, su amor ha desaparecido de la red y ella se siente viuda. Quiere reclamar su pensión y, además, cobrarla en bitcoins. Le he repetido hasta la saciedad que solo es posible impartir justicia entre humanos, pero no escucha. Me halaga, me llama campeón, dice que consigo lo que me propongo... No sé cómo he podido acceder sabiendo que es escasa la probabilidad de que el asunto prospere.
    La he visto tan hundida que también solicitaré una indemnización millonaria por daños y perjuicios a esa desaprensiva empresa.

    | Junio 2024
     Participante
     Votos recibidos por la Comunidad: 2

  • TODO POR AMOR

    Después de un divorcio traumático no quería tener otra pareja pero, cuando llegó la primavera su sangre se alteró más de lo normal y soñó con recuperar a su primer amor, Jacinto, su primo. Intentó, por las buenas, concertar un encuentro. Al no conseguirlo, no le quedó más remedio que hacerlo por las malas. La oportunidad se la ofreció una herencia que recibieron de un familiar. Como se sabe, porque es un tema manido, estas situaciones suelen ser conflictivas, así que, sólo necesitó enredar todo con muchos recursos hasta conseguir que se vieran las caras en los tribunales. Allí, la llamó loca, le dijo que no entendía que con su formación no fuese capaz de razonar un poquito. Ella se derrumbó. Su confesión provocó en él, primero, indignación y, después, ternura.
    Si después de pagar a los abogados quedara algo de dinero, les gustaría hacer juntos un viaje a Benidorm.

    | Abril 2024
     Participante
     Votos recibidos por la Comunidad: 2

  • INTELIGENCIA EMOCIONAL

    No es una mujer muy agraciada, pero tiene una mente prodigiosa. Se tituló en dos carreras a la vez y habla con fluidez varios idiomas. De carácter decidido, sabe resolver los problemas con inteligencia. Sin embargo, su vida sentimental ha sido un desastre. De adolescente, se enamoró perdidamente del compañero más torpe de la clase con el que terminó montando una empresa. Aunque ella, por miedo a ser rechazada, nunca se sinceró, él siempre jugó al despiste. Durante años, esperando, en vano, una declaración de amor, le regaló su talento y su trabajo para que triunfara y se enriqueciese. Necesitó verlo en instagram con una modelo para desengañarse.
    Por fin, ha reclamado lo que le corresponde, lo que es suyo. Aunque él alega que actúa por despecho, el juez lo ve muy claro, para resolver el caso no es necesario saber mucho de leyes, basta con creer en la equidad.

    | Marzo 2024
     Participante
     Votos recibidos por la Comunidad: 3

  • Amores Metálicos

    Me comí las uvas con desgana. Convencido de que nada podría ir a mejor, me ahorré fijarme buenos propósitos. Barruntaba la desgracia, y llegó. Nada más comenzar el año, la empresa me comunicó el despido. Alegan que necesitan a alguien más eficiente. Son tajantes, no les sirvo para nada, ni siquiera contemplan la posibilidad de una negociación.
    Me ha robado mi puesto la llamada Inteligencia Artificial. De buena gana la denunciaría por ladrona pero, me ha dicho mi abogado que no hay ley que la condene, que las máquinas no van a la cárcel. Para colmo, la muy cínica, con una palmadita en la espalda, me ha deseado suerte y me ha aconsejado que me reinvente. Resignado, se lo he agradecido y, como a pesar de todo, me ha resultado atractiva, hemos acordado encontrarnos en mi segunda vida en la que ya estaré reencarnado en un apuesto robot.

    | Enero 2024
     Participante
     Votos recibidos por la Comunidad: 1

  • ¡NO HAY DERECHO!

    Cuando por fin consiguieron tener unos sueldos decentes, se casaron. Tenían por delante un futuro que parecía prometedor. Primero se compraron el piso, después el coche…, y más tarde decidieron ser padres. No podían imaginar, ni en el peor de los escenarios posibles, que les despedirían a los dos, y a la vez. Sin apenas recursos, las deudas les asfixiaron rápidamente. El día que abrieron la nevera y la vieron vacía, se les vino el mundo encima.
    Sin contactos que les ayuden, sólo han encontrado trabajos precarios con los que pagan los créditos. No quieren quedarse en la calle, reclaman Justica, pueden documentar que los contratos que firmaron escondían, en su letra pequeña, cláusulas abusivas.
    Después de escuchar en las noticias que los bancos han obtenido unos beneficios récord, se suben por las paredes. No se pueden perdonar que este año sus hijos se hayan quedado sin regalos de Reyes.

    | Febrero 2023
     Participante

  • REFUGIADOS DE GUERRA

    No necesité salir de casa para saber cómo es la vida sin paz. Mis padres se llevaban a matar. Parecían dos soldados librando una batalla interminable. Su confrontación era continua, nunca dieron una oportunidad al consenso.
    Yo vivía atemorizado, cuando me acostaba me tapaba las orejas con las manos, pero sus gritos conseguían taladrar mi cabeza. Pasaba toda la noche luchando con ellos; por la mañana, al llegar al colegio, me quedaba dormido. Pronto comprendí que no tenía otra alternativa que la de marcharme de allí. El día que me armé de valor, cogí mi mochila y, sin mediar palabra, desaparecí. Menos mal que, al ver mi desamparo, unas almas caritativas me acogieron en su hogar. Después de conocer el paraíso, de ninguna manera quería volver al infierno, por eso, supliqué al juez que me considerase un refugiado de guerra. Gracias a su resolución, he vuelto a nacer.

    | Enero 2023
     Participante
     Votos recibidos por la Comunidad: 3

  • OKUPAS

    Mi vieja casa me pedía a gritos una reforma y no se la pude negar.
    Cometí el error de no firmar un contrato con cláusulas claras, me fie de un anuncio de internet en el que todo parecía fácil y rápido. Unos operarios se instalaron en mi vivienda hace nueve meses y aún no han comenzado las obras, siempre alegan que no llegan los materiales por problemas de distribución. Yo ya no me creo nada. He puesto el asunto en manos de un abogado porque no quiero cometer una barbarie.
    No sé cuándo va a finalizar esta pesadilla. Afortunadamente, la gente me ayuda. Doy las gracias a todos, en especial a mi amigo Jacinto, aunque él no lo sabe, he aprovechado su viaje al extranjero para trasladarme a su piso. ¡Menuda sorpresa se va a llevar cuando regrese! No le va a hacer ninguna gracia tener que cambiar de domicilio.

    | Octubre 2022
     Participante
     Votos recibidos por la Comunidad: 10

  • UNAS VACACIONES INOLVIDABLES

    Cuando llegó el verano con su infernal ola de calor me encontró cansado. Estaba saturado de tantos juicios, demandas y recursos. Estaba aburrido de leer, todo el santo día, artículos de leyes y reglamentos. Necesitaba relajarme, dejar de programar las jornadas, no hacer absolutamente nada. Buscando en internet encontré un maravilloso viaje a una isla paradisíaca y, sin pensármelo dos veces, me fui con mi nueva pareja. Todo salió mal, volamos con retraso, se perdieron las maletas, cayeron lluvias torrenciales, en el hotel el servicio era malo y la comida peor..., no vimos, por ningún lado, ni aguas cristalinas ni arena blanca. Y lo peor fue que, enseguida, la convivencia puso de manifiesto que nuestras diferencias eran irreconciliables. Estuvimos enfadados y distantes todo el tiempo.
    Este año no me ha costado volver a la rutina, eso sí, mientras espero contestación a mis numerosas reclamaciones, ya planeo, minuciosamente, las próximas vacaciones.

    | Agosto 2022
     Participante
     Votos recibidos por la Comunidad: 3

  • CUESTIÓN DE ESTILO

    Vestía siempre con tanta elegancia que nadie podía imaginar que hubiese nacido en una chabola. El secreto estaba en sus manos, con una aguja y un dedal hacía magia, convertía cualquier trapo en una prenda de alta costura. Cuando alcanzó la fama, le rodearon un montón de sinvergüenzas que pretendían quedarse con su dinero. Menos mal que una abogada, a la que le apasionaba la moda, le salvó la vida. Con alegaciones bien fundamentadas consiguió ganar los juicios, proteger su patrimonio. A la hora de pagarle, se llevó la agradable sorpresa de no tener que abonarle honorarios, bastó con llenar su armario de modelos exclusivos.
    No puede estar más contento, sabe que su ropa cada vez que traspasa el umbral de los juzgados causa gran admiración, además, en la presentación de su última colección, en la que la toga ha sido la estrella, ha revolucionado las pasarelas con apuestas imposibles.

    | Julio 2022
     Participante
     Votos recibidos por la Comunidad: 4

  • ARSENALES INTERIORES

    Aunque siempre consideraba que sus continuas infidelidades eran algo natural, cuando se enteró de mi desliz, se puso hecho una fiera, me declaró la guerra. No había duda de que en su interior guardaba un arsenal con armas tan poderosas como los celos, la venganza o el rencor. Temí, incluso, por mi vida. Afortunadamente, nos divorciamos antes de que corriese la sangre. Deseosa de que todo terminase cuanto antes, en el acto de conciliación, cedí a todas sus pretensiones. Que se quedase con el dinero, con las joyas, con las cosas de valor… no me importaba, me daba igual. Yo sólo quería no perder a Flequillo, nuestra mascota, el fiel compañero que me quitaba las penas. No podía imaginar peor condena que la de vivir sin él.
    Desde entonces, no nos separamos para nada, pasamos los días juntos en paz y armonía.

    | Marzo 2022
     Participante
     Votos recibidos por la Comunidad: 8

  • FE EN LA JUSTICIA

    Aunque tenía pleitos pendientes en la ciudad, cuando mi abuelo me pidió ayuda, lo dejé todo y fui a verlo.
    El problema era D. Cipriano, el nuevo párroco del valle. Su devoción cristiana le llevaba a tocar las campanas con entusiasmo cada cuarto de hora; empezaba con el canto del gallo y terminaba bien entrada la noche. Los vecinos, desesperados, decidieron que para recuperar la tranquilidad había que acudir a la Justicia. No tardé en empatizar con ellos, acepté el caso sabiendo que no llevaría comisión ni cobraría honorarios. Con un apretón de manos acordamos que, si el fallo era desestimatorio, nada me deberían, en caso contrario, me pagarían con productos de la tierra.
    Los parroquianos quedaron contentos con la resolución y ahora solicitan mis servicios. Estoy desconectada porque no llega Internet, pero como la gente es amable, el aire puro, la comida sana… No veo el momento de regresar.

    | Febrero 2022
     Participante
     Votos recibidos por la Comunidad: 6

  • TODOS CONTRA EL FUEGO

    Convencido de que a cierta edad es urgente cumplir tus sueños porque el futuro se evapora, colocó en internet este anuncio: «Cambio céntrico despacho de abogado con cartera de clientes por una casa en la montaña». La respuesta no se hizo esperar. No volvería a pisar asfalto, olvidaría las prisas…colgaría definitivamente la toga. Le estaban esperando el trino de los pájaros, los verdes prados, el aire puro... Desgraciadamente, el día de su llegada al paraíso se declaró un pavoroso incendio, las llamas calcinaron miles de hectáreas, fue un milagro que no alcanzasen a su vivienda, que pudiese salvar la vida.
    Con este panorama tan desolador no ha dudado en ponerse de nuevo la toga, quiere promover iniciativas legislativas para la recuperación de la zona y la conservación de las especies que se han visto amenazadas. También se propone conseguir que se condene al pirómano a ser bombero toda su vida.

    | Septiembre 2021
     Participante
     Votos recibidos por la Comunidad: 12

  • UN MUNDO MEJOR

    Siempre nos tuvimos el uno al otro, pero el maldito virus se lo ha llevado y, aquí estoy más sola que la una. Aunque mi vida ha quedado muy averiada, no contemplo otra alternativa que la de seguir adelante. Arreglaré lo que pueda, esta vez, no contrataré a Pepe Gotera y Otilio, sino a profesionales. Primero buscaré a un buen abogado para que me asesore, no me apetece que esos pedorros de mis sobrinos, que pasan olímpicamente de mí, hereden ni un solo euro. Eso sí, para que vean que no soy rencorosa, quiero dejarles un mundo mejor. Voy a dedicar toda mi energía y mis ahorros a cuidar nuestro Planeta. Mi fundación investigará el hidrógeno verde y, además, me fijaré objetivos asequibles como no renovar tan a menudo el armario, o alimentarme de manera natural.
    Como el movimiento se demuestra andando, salgo, ahora mismo, a comprarme un coche eléctrico

    | Abril 2021
     Participante
     Votos recibidos por la Comunidad: 9

  • LEGISLACIÓN MARCIANA

    Nacido en una casa con suelo de barro, cuando tuvo uso de razón se juró que algún día sería propietario de mansiones. Siendo muy joven abandonó el pueblo para cumplir su sueño; pasar de lo rural a lo urbano no le supuso mayor problema, una infancia de frío y hambre hizo de él un tipo resiliente. Sin apenas preparación, pero con un enorme olfato para los negocios, durante el boom inmobiliario, ganó dinero a espuerta. Su ambición no tenía límites, hubiese edificado, incluso, sobre las aguas del mar.
    En tantas ocasiones actuó al margen de la ley que, ahora, no sabe muy bien si tiene más casas que causas, o viceversa. A sus abogados los tiene locos, les ha dicho que estudien la legislación que regirá en Marte. Utilizando el material idóneo para mitigar las inclemencias del clima, quiere construir allí una vivienda para pasar su jubilación en ese planeta.

    | Marzo 2021
     Participante
     Votos recibidos por la Comunidad: 13

  • VENTAJAS DEL TELETRABAJO

    La pandemia nos ha dado la oportunidad de comprobar las ventajas del teletrabajo. Para muestra un botón.
    Temprano suena el despertador, con la legaña puesta, salto de la cama al ordenador. Necesito un café para empezar la jornada, lo preparo al mismo tiempo que reviso los correos, pero antes de que pueda tomar el primer sorbo escucho los berridos de los niños, no paran de pelearse y de tirar todo, comienzo a gritar como una loca, y ya no paro; de pronto, me doy cuenta de que hoy finaliza el plazo para interponer el recurso, lo voy redactando mientras tiendo lavadoras, coloco lavavajillas, cuezo espaguetis, reviso deberes...
    Cuando el reloj marca las diez, caigo rendida en el sofá, la televisión me recuerda los problemas que asolan al planeta. ¿Cómo podremos erradicar la pobreza? ¿cómo lograremos parar el calentamiento global?... El cansancio me vence, mañana lo pensaré… Mañana será otro día.

    | Enero 2021
     Participante
     Votos recibidos por la Comunidad: 34

  • PEREZA PANDÉMICA

    Me pregunto de quién heredé esa manía que tengo de apropiarme de lo ajeno sin que nada me detenga. Por lo que me han contado, mi familia era gente honrada dedicada a negociar con dinero, primero fueron prestamistas y más tarde banqueros.
    Siendo muy joven, llegó a mi vida una señora llamada Justicia que, rápidamente, me puso en mi sitio, un lugar que no recomiendo a nadie, pero al que yo, con el tiempo, me he ido acostumbrando. Sabiendo que el acceso al mercado laboral lo tenía cerrado, fui acumulando condenas durante años. Ahora, a mi edad, la salud es lo primero, hay que seguir las recomendaciones: beber mucha agua, vigilar la tensión, proteger del frío la garganta…Mi abogado dice que si interponemos un recurso, en cuatro días estaré en la calle. No sé qué hacer, con esto de la pandemia, cada vez me da más pereza salir de “casa”.

    | Octubre 2020
     Participante
     Votos recibidos por la Comunidad: 10

  • RURALITA PRIMERIZO

    El confinamiento se encargó de evidenciar lo mal que habíamos colocado los ladrillos. Nuestros esfuerzos para fortalecer la relación resultaron inútiles. Pronto, todo se derrumbó. Los escombros nos rodearon, y tuvimos que salir corriendo. Sin apenas ahorros, me encontraba, literalmente, en la calle. Recurrí a familiares y amigos, pero lo único que conseguí fue saber que había una casa abandonada en un pequeño pueblo no muy lejos de Madrid. Vendí la alianza y, prácticamente, con lo puesto, allí me presenté. Afortunadamente, conté con el apoyo de los vecinos, cuando supieron que era abogado; todos quisieron cooperar, unos me traían leche, otros huevos... incluso, me hicieron muebles.
    Aquí sigo, pagando tanta "solidaridad". Sobre mi mesa se acumulan casos de servidumbres de paso, deslindes, herencias... Aunque noto cierta animadversión de los enemigos de mis clientes, estoy contento, progreso adecuadamente en el conocimiento del mundo rural, ya distingo, perfectamente, el tomillo del romero.

    | Agosto 2020
     Participante
     Votos recibidos por la Comunidad: 7

  • SIN UN ADIÓS

    Al difunto Rodolfo, que en paz descanse, siempre le acompañaron los problemas. Fue un artista de enorme talento, pero también un manirroto. Su acceso a la fama, por la puerta grande, lo descontroló por completo. En no pocas ocasiones, se levantaba millonario y, a la hora de acostarse, estaba ya en la ruina. Con una vida desenfrenada, iba saltando, sin descanso, de una causa judicial a otra. Aunque nada hacía para facilitar el trabajo de Ricardo, su abogado, este siempre demostró ser un profesional eficaz. Poco tiempo después de conocerse, descubrieron que les unía algo más que los pleitos. Desde entonces, han pasado más de veinte años, en los que vivieron de todo, incluso, momentos felices; a pesar de ello, nunca se separaron.
    Ricardo no ha podido despedirse de él, desolado, maldice a este extraño virus que le ha arrebatado casi todo, pero que no conseguirá que cuelgue la toga.

    | Julio 2020
     Participante
     Votos recibidos por la Comunidad: 5

  • LEGISLACIÓN CASERA

    Cuando un monstruo, invisible y silencioso, llegó a nuestras vidas y las arrasó, supimos que el mundo no tenía muros de hormigón, sino que era, en realidad, un castillo de naipes.
    La rápida propagación del maldito coronavirus nos obligó al confinamiento. Pronto, nos dimos cuenta de que esta nueva convivencia, sin normas, no funcionaba. Echando mano de mis conocimientos y experiencia en la materia, toda la familia regulamos, pormenorizadamente, horarios, tareas, ocio... y lo más importante: la forma y frecuencia del lavado de las manos, y el uso correcto de la mascarilla. Ahora, las cosas marchan mucho mejor; para resolver los conflictos acudimos a la conciliación, aunque, no descarto que, si la situación se alarga, lleguemos a celebrar algún juicio.
    Sólo el tiempo dirá si alguno de mis hijos sigue mis pasos profesionales. De momento, todos confiamos en que la ciencia encuentre pronto la vacuna que acabe con tanto dolor.

    | Abril 2020
     Participante
     Votos recibidos por la Comunidad: 3

  • COLECCIONISMO

    Nos vendieron que la felicidad se podía comprar y me lo creí.
    Con cada caso que ganaba fui acumulando todo tipo de artilugios y cachivaches innecesarios; cuando ya no cabía ni un alfiler en casa, compraba otra y la llenaba de la misma forma. En poco tiempo, conseguí tener una buena colección de casas y cosas.
    Tuvo que llegar el asma a mi pecho para que me uniese activamente a esos ecologistas que alertan del desastre que supone para el planeta no proteger la diversidad, la degradación de los ecosistemas, el cambio climático...
    Ahora, con un hilo de voz, me desgañito en los tribunales defendiendo a un único cliente: el Medio Ambiente. Consciente de que mi estilo de vida debe ser sostenible, consumo de manera responsable; sin abandonar mi afición al coleccionismo, rebuscando en la basura logro rescatar multitud de objetos a los que queda, aún, una segunda vida.

    | Enero 2020
     Participante
     Votos recibidos por la Comunidad: 4

  • LOCURA TRANSITORIA

    Un mal día el fantasma del éxito me pilló desprevenida y me trastornó. Una sola idea se me fijó entre ceja y ceja: ganar dinero. Llevada por mi nueva situación mental, decidí dar un giro drástico a mi carrera. Dejé de ser abogada de causas perdidas, de batallar contra las injusticias, de defender a gente corriente..., y por dejar, hasta dejé de ser amable. Los nobles propósitos de cambiar el mundo quedaron sólo en papel mojado.
    Mis nuevos clientes eran gente de dudosa reputación, pero de muy buena cartera. Para gestionar sus asuntos necesitabas, al menos, tener pocos escrúpulos. Con los bolsillos llenos, salté del piso al chalé, del utilitario al deportivo, de la cocina de puchero a la de fusión, de la microeconomía a la macroeconomía y, todo ello, sin red.
    Gracias a Dios, tuve un momento de lucidez que aproveché para coger el dinero y salir corriendo.

    | Septiembre 2019
     Participante
     Votos recibidos por la Comunidad: 4

  • DESCANSE EN PAZ

    Don Leonardo fue un cliente más que peculiar. Era tan rico como aprensivo. Aunque se hacía un reconocimiento anual completísimo, al menor síntoma acudía corriendo al hospital. Nunca le encontraban nada, pero salía convencido de que le quedaban dos días de vida. Nervioso, me llamaba inmediatamente para cambiar el testamento que estábamos redactando; soltero y sin hijos reconocidos, dividió su fortuna en numerosos lotes que distribuía entre familiares, amigos e incluso conocidos. Yo, sentado al teclado, podía pasar horas moviendo lotes como si fuesen piezas de ajedrez. Sabiendo que no era amigo de debatir nada, me armaba de paciencia y, a todo le decía amén.
    Falleció, de manera repentina, dejando un documento manuscrito en el que hacía donación de sus órganos a la ciencia y declaraba su voluntad de que el destino de todos sus bienes fuera el estudio de la enfermedad rara de la que estaba seguro que moriría.

    | Agosto 2019
     Participante
     Votos recibidos por la Comunidad: 12

  • TONTEANDO NUEVAMENTE

    Sin apenas conocerse, pasaron de tontear en los juzgados a vivir juntos. La convivencia fue un fracaso. Detrás de pequeños detalles, como que siempre enviudaba algún calcetín después de la colada, o que el cactus estaba seco, podíamos encontrar un buen número de malos usos y peores costumbres que nada tenían que ver con el derecho consuetudinario, como muy bien sabían ellos aunque su herramienta principal de trabajo fuese la norma escrita.
    En el día a día, optaron por representar, con vehemencia y sin medir las consecuencias, el papel de acusador o defensor según su conveniencia. La relación se deterioró rápidamente. Conscientes de que la peor solución era continuar, eligieron la ruptura.
    Repartidos los bienes, en ambos ha quedado un cierto resquemor al considerarse el más desfavorecido. Afortunadamente, de ánimo andan bien, convencidos de que las cosas no siempre salen a la primera, cada uno por su lado tontea nuevamente.

    | Julio 2019
     Participante
     Votos recibidos por la Comunidad: 4

  • LECCIONES DE LA VIDA

    Por suerte o por desgracia, o por ambas cosas a la vez, nadie acudió a su rescate cuando en su juventud comenzó a frecuentar malas compañías. No necesitó mucho tiempo para terminar sentado ante la justicia. Al decretar el juez su ingreso en prisión entró en otro mundo. Lejos de derrumbarse, quiso conocer y comprender las leyes que estaban marcando su destino. Puso tanto empeño en la tarea que incluso por las noches, a la luz de una vela, repasaba los artículos del Código Penal. Cinco años le bastaron para salir de la cárcel con su flamante título bajo el brazo.
    Después de ejercer durante muchos años la abogacía, ha decidido dedicar su tiempo a dar charlas en los institutos; el cartel que las anuncia lleva un llamativo título:"LECCIONES DE LA VIDA". No gana un euro, pero se siente muy bien pagado.

    | Junio 2019
     Participante
     Votos recibidos por la Comunidad: 2

  • DESPEDIDAS LABORALES

    En breve me jubilo, mi dilatada vida laboral llega a su fin. Echo la vista atrás y veo mis difíciles comienzos; trabajé con tesón, defendí a muchos clientes, pasé media vida en los juzgados...a golpes de fracasos fui fraguando los éxitos.
    La adaptación a las nuevas tecnologías supuso, y aún hoy supone, un enorme desafío, una transformación radical en la forma de trabajar, la tradicional dejó de ser eficiente. El móvil se convirtió en nuestro "amigo" inseparable, y nosotros en abogados las 24 horas al día. Aunque el cuerpo nos pide a gritos un derecho de desconexión, tenemos miedo, la amenaza tiene nombre y apellido, se llama Inteligencia Artificial.
    Había planeado todo para mi retiro, vivir en un pueblo, cultivar mi propio huerto...pero, no me quedo tranquilo, voy a prolongar un tiempo más mi actividad, quiero colaborar en la elaboración del Estatuto de los Trabajadores del siglo XXI.

    | Abril 2019
     Participante
     Votos recibidos por la Comunidad: 1

  • AMORES IMPOSIBLES

    Se conocieron en el último Congreso anual de la Abogacía. Lo suyo no fue un amor a primera vista, al contrario, sólo cruzaron miradas de desconfianza.
    En sus intervenciones, D. Futuro, moderno de los pies a la cabeza, hizo una defensa apasionada de Dña. Tecnología, demostró su labor transformadora y su eficiencia aportando pruebas como el expediente electrónico o las bases de datos digitales. En todo momento abogó por seguir invirtiendo en innovación. Por su parte D. Pasado, con un estilo más clásico, confesó que le apenaba despedirse de su compañero de fatigas D. Papel, y visiblemente emocionado, recordó que valores como la honestidad, la lealtad o la dignidad, entre otros muchos, deben acompañar siempre a los abogados.
    Después de varios encuentros un idilio entre ellos parece imposible, pero puede que sea el comienzo de una buena amistad.

    | Marzo 2019
     Participante

  • TERAPIAS JUDICIALES

    Quiso la casualidad que, después de muchos años, me encontrase con una amiga de la infancia. En la terraza de un bar, hablamos del presente y del pasado, recordamos a compañeros y a profesores del colegio. Cuando, con desenfado, comenté su fama de rebelde y sus frecuentes visitas al despacho del director, ella enmudeció. Su cara se convirtió en la viva imagen de la desolación. De un trago bebió un vaso de agua y, como un volcán en erupción, expulsó toda la tortura que llevaba dentro. Consternada, me reproché no haber visto el engaño, e inmediatamente le ofrecí mis servicios. Aceptó sin dudarlo.
    Sin demora, presentamos la demanda, recopilamos pruebas, localizamos testigos...preparé a conciencia su defensa.
    Declarar ante el juez ha resultado ser su mejor terapia. Han desaparecido las manos extrañas que perturbaban su sueño.

    | Julio 2018
     Participante

  • TENTACIONES

    Cuando le llegó la fama no supo caminar con ella y acabó dando tumbos. Deslumbrado por el lujo, se entregó a una vida frenética llena de excesos. Dinero que ganaba, dinero que gastaba en un abrir y cerrar de ojos.
    Pronto acumuló numerosas causas con la Justicia. Para su defensa, contrató a un joven abogado de brillante expediente académico, al que pagaba tarde, mal y nunca. Al letrado le tentaron en numerosas ocasiones poniendo sobre la mesa cifras astronómicas, a cambio de desvelar secretos de la intimidad de su afamado cliente. Siempre se negó. No podía... No debía... No quería. Vender una traición no era una forma ni legal ni elegante de cobrar los honorarios.

    | Abril 2018
     Participante
     Votos recibidos por la Comunidad: 4

  • EN CASA DEL HERRERO...

    Presumíamos de ser unos profesionales de éxito. No teníamos secretos, era imprescindible trabajar a fondo cada caso. Con total dedicación, perdidos entre libros, devorábamos el tiempo estudiando leyes y procedimientos, redactando recursos, asistiendo a juicios... Siempre pendientes de resolver los conflictos ajenos, los de casa se resolvían a golpe de silencio, y aunque por lo bajini nos convertíamos en severos jueces del otro, nunca tuvimos ni un simple careo.
    Ahora que tú has sido más rápido en marcharte, rescato de los recuerdos, risas y llantos, los pongo en la balanza y el resultado es desolador. Aunque lo nuestro ya no se pueda reparar, me estoy planteando escribir una guía práctica para la vida privada de los abogados.

    | Septiembre 2017
     Participante
     Votos recibidos por la Comunidad: 3

  • SALVADO POR LA CAMPANA

    El terrible asesinato había conmocionado a la ciudad. El juicio levantó una enorme expectación y la sala estaba abarrotada. Allí estaba yo, solo, sentado en el banquillo, era el encausado. Hacía un calor asfixiante y el sudor corría desbordado por mi cara; para secármelo vacié mi neceser, pero no encontré pañuelos. Empapado, vi como la acusación presentaba pruebas tan extravagantes como contundentes; la principal, un trozo de piel de la víctima con un tatuaje en el que se podía leer mi nombre y debajo la palabra asesino. Mi abogado enmudeció. El bullicio era enorme, el juez se afanaba en restablecer el orden golpeando la mesa con un enorme mazo de hierro, mientras miles de dedos acusadores me señalaban. La angustia me resultaba insoportable... Por fin, ¡qué alivio! La melodía que tanto aborrezco, hoy se convertía en salvadora, arrastrándome como un temporal de viento hacia la luz del día.

    | Agosto 2017
     Participante
     Votos recibidos por la Comunidad: 1